Este 15 de abril, desde el Observatorio FIEX, queremos renovar nuestro compromiso con una infancia libre, feliz, protegida y con oportunidades. Una infancia en la que cada niño y niña pueda decir: «Aquí puedo ser yo, crecer con dignidad y soñar sin límites.»

El 15 de abril se convierte para el Observatorio de las Familias y la Infancia de Extremadura en una fecha simbólica para poner el foco en los derechos, las necesidades y el bienestar de la infancia en nuestra comunidad. Es una oportunidad para recordar que cada niño y niña tiene derecho a crecer protegido, acompañado y con acceso a todas las oportunidades que necesita para desarrollar su potencial.

El Día Mundial del Niño no es solo una jornada de celebración; es también una oportunidad para reflexionar sobre los retos que aún persisten. Aunque se han logrado avances importantes en el acceso a la educación, la salud y la participación infantil, todavía existen desigualdades que afectan a niños y niñas en situación de vulnerabilidad.

Factores como la pobreza, la violencia, la discriminación o el acceso desigual a recursos limitan el desarrollo pleno de la infancia. Es responsabilidad de toda la sociedad —instituciones, familias, profesionales y ciudadanía— garantizar entornos seguros, inclusivos y estimulantes para los niños y niñas.

Infancia: presente y futuro de nuestra sociedad

Cuando hablamos de infancia, no solo nos referimos a una etapa de la vida. Hablamos de millones de historias en construcción, de sueños, talentos y emociones que merecen ser escuchadas, respetadas y cuidadas. En Extremadura, más de 150.000 niños y niñas forman parte activa de nuestra sociedad. Son presentes llenos de energía y futuro en movimiento.

Garantizar sus derechos no es una tarea exclusiva de las familias o las instituciones: es una responsabilidad compartida que requiere compromiso político, social y comunitario.

Desafíos actuales en la infancia extremeña

En los últimos años, Extremadura ha avanzado notablemente en políticas de apoyo a la infancia y a las familias, pero siguen existiendo desafíos importantes. Entre ellos:

–  La lucha contra la pobreza infantil y las desigualdades de origen.

–  El acceso equitativo a la educación de calidad, la cultura y el ocio saludable.

–  El bienestar emocional y la salud mental en la infancia y adolescencia.

–  La prevención del maltrato, la violencia y cualquier forma de discriminación.

Desde el Observatorio trabajamos para analizar estos desafíos de manera rigurosa, impulsar políticas basadas en evidencia y generar propuestas que pongan en el centro a los niños y niñas como sujetos de derechos.

Participación infantil: una infancia que opina, decide y transforma

Uno de los pilares clave de nuestro enfoque es la participación infantil real y efectiva. Creemos en una infancia que no solo es destinataria de servicios, sino protagonista de su propia realidad. Los consejos de infancia, las actividades escolares, los foros de debate y los espacios de expresión son herramientas fundamentales para escuchar sus voces y construir, junto a ellas, un modelo de sociedad más inclusivo y democrático.

Extremadura y su compromiso con la infancia

En Extremadura, las políticas públicas orientadas a la infancia han cobrado cada vez mayor relevancia. A través de diferentes programas, se promueven medidas que abarcan desde el apoyo a la conciliación familiar hasta la prevención del acoso escolar, la promoción de la salud mental y el acompañamiento a familias en situación de vulnerabilidad.

El Observatorio FIEX desempeña un papel clave como espacio de análisis, reflexión y propuesta. Desde aquí, trabajamos para generar conocimiento actualizado sobre la realidad de la infancia en nuestra comunidad y fomentar la participación de los propios niños y niñas en los asuntos que les afectan.